El navarro Paul Alone inauguró la nueva temporada de El Veintiuno
Desde hace ya unos años la música vive un cambio de paradigma, que ha sido propiciado en gran medida por las redes sociales. Antes la música llegaba a los oídos de la gente después de una larga trayectoria o por una intensa campaña promocional de las compañías discográficas. Ahora son las redes sociales las que, de la noche a la mañana, aúpan a un artista que hasta hace nada era un completo desconocido. Probablemente, pocos habrán oído el nombre de Paul Alone. Y sin embargo, este artista navarro (de verdadero nombre Pablo Sola) logró llenar la sala El Veintiuno, que de esta forma inauguraba el pasado sábado su nueva temporada de actuaciones tras el descanso estival.
Lo cierto es que Paul Alone había participado anteriormente en programas televisivos como La voz o Dúos increíbles (que es en la actualidad otra forma de darse a conocer), pero era la primera vez que actuaba en Huesca y el público -mayoritariamente femenino- se sabía prácticamente todas las canciones de memoria. Paul Alone es un artista que procede del pop, pero que posee evidentes puntos de contacto con la canción de autor, con la escena indie y con un cierto apego por la fusión que le conecta con otros creadores como El Kanka o Mr. Kilombo. Por otro lado, su característica voz rota le acerca también a alguien como Guitarricadelafuente, aunque su tono es más grave. Con su reconocible sombrerito, físicamente guarda un cierto parecido con Johnny Depp y, desde luego, es consciente de su poder de seducción.
Arropado por una competente banda formada por guitarra, bajo y batería, inició su actuación precisamente con el tema que da título a su único álbum, aparecido a finales del año pasado, Y yo qué sé?, para continuar después alternando temas de ese disco (Loca locura, Menos mal que te conocí, Quería), con otros como Bailao’, De oca en oca o Un día más. Siguió más tarde con la delicada melodía mediterránea (interpretada con cajón) de Te acuerdas? y con otros temas como Vuela o Pequeña, siempre intercalando canciones de su álbum con otras no incluidas en el mismo. El ritmo del concierto subió con la rumba rock de No me rayes. Y la velada finalizó con el suave vals de Si te vas (su nuevo tema, que interpretó con guitarra acústica) y el puro pop de Sólo ven» Pero, por supuesto, hubo propina. El bis comenzó con Me olvidé de lo bueno, un tema de aires fronterizos que podría formar parte perfectamente del repertorio de Los Secretos. Y tras una introducción en forma de solo de cajón, Paul Alone se despidió de su entregado público con la atmósfera sureña de No valgo pa’ ciudad -que interpretó entre el público para deleite de sus fans- y con la rumba Me siento vivo, con un cierto aire a Kiko Veneno. Había prometido en una entrevista a este Diario que iba a montar una verbena, y al final lo consiguió.
Texto: Luis Lles
Fuente: Diario del AltoAragón
